Les compartimos el trabajo de nuestro colaborador y amigo, el cineasta y fotoperiodista David Jaramillo quien a través de su cámara nos presenta a Ilaria Rodríguez y Francisco Gaytán. Una pareja que ha pasado toda su vida en el ejido Nueva Atalaya, en Cuatro Ciénegas, Coahuila, quienes nos cuentan con nostalgia como poco a poco la poza situada en ese lugar «fue secándose debido a la extracción de agua por parte de la empresa Beta Santa Mónica para cultivos de alfalfa.»

“Había agua y se acabó. Por eso pues en otras partes también se puede acabar, aunque haya mucha… mucha agua” fue la frase con la que se despidió la señora Ilaria Rodríguez del cortometraje.